BLOG DE FERNANDO QUIRÓS

De cómo Goyache se manifiesta contra la politización de la universidad, haciendo declaraciones políticas a favor de la derecha

Por Fernando Quirós

Leo en la página web de AulaFacil:   la expresión “vuelta la burra al trigo” se usa en castellano para expresar hartazgo y fastidio frente a algo que se repite numerosas veces, como por ejemplo una opinión, argumento o error, sin que el interlocutor enmiende un ápice su discurso; incluso repitiéndolo cuando se ha dado por zanjado el asunto.

No tenía yo intención de perseverar en mis críticas al rector-candidato. Pero es que, rizando el rizo, ni corto ni perezoso,  Don Joaquín, continua acudiendo a los medios más reaccionarios, para “sostenella y no enmendalla” y decir sin sonrojo que “si no hacemos ilustre a la Presidenta, a quien vamos a nombrar”. Queda muy claro que o bien él mismo, o bien su equipo de campaña han decidido, que el acto que perpetró el PP con complutenses del PP, para iniciar la precampaña de Díaz Ayuso, terminará por beneficiarle en las elecciones del 21 de marzo. Allá él, allá ellos. A quien no beneficia es la Universidad Complutense de Madrid y especialmente a nuestras Facultades de Ciencias de la Información y Ciencias Políticas y Sociología, que han sido arrastradas por el barro y sacrificadas a mayor gloria de la señora presidenta. Estas, queridos lectores, son declaraciones (¿quizás toma de postura?) POLÍTICAS.

Primero fue en 13TV, de las que la profesora Esther Del Campo, dijo, en el Consejo de Gobierno, sentirse avergonzada (y somos legión los que sentimos lo mismo).Luego fue en Telemadrid, el día 8 de febrero, poco después de esa misma reunión del Consejo. Y ahora en “El Mundo”, el día 20. Goyache se despacha contra el proyecto de la LOSU: «La nueva Ley de Universidades es irrelevante, insuficiente e ideológica».

Sobre estas últimas declaraciones se ha pronunciado la profesora María Castro, en la red twitter.

Es decir que, según esta doctrina las universidades públicas, no deben ser políticas, pero si pueden ser partidistas. De hecho, el candidato-rector está politizando la campaña, en la línea en que al Partido Popular y a Isabel Díaz Ayuso, más les gusta: la UCM está en manos de podemitas, mugremitas, comunistas, batasunos, feministas radicales, etc…

Una universidad entendida como una organización política (Aristóteles, que poco te leen en Veterinaria) es necesaria para enriquecer y sostener las democracias, que el trumpismo rampante quiere eliminar. La opción política que se toma al hacer declaraciones de este tipo, no es la de promover el debate de las ideas políticas y sociales. Más bien todo lo contrario

En 2019, yo voté a Joaquín Goyache por sus ideas progresistas y por haber formado parte del equipo de José Carillo. Trabajé, junto a un modesto grupo de compañeros, para conseguir que mi sector electoral (PDI con vinculación permanente) se inclinara por él, en una facultad, como Ciencias de la Información que era territorio de Carlos Andradas. Y ganamos para Goyache nuestro sector. También se ganó en mi facultad el sector de estudiantes. Y recuérdese, lo estrecho de la victoria. Fue por un puñadito de votos.

Luego (¿antes?) vino su pacto con Federico Morán, que fue un pacto político con un partido político. Me costó digerirlo, pero mantuve mi apoyo al nuevo rector, como director del Departamento de Periodismo y Nuevos Medios, en un centro donde el decano, Jorge Clemente, no ha perdido ocasión, en estos cuatro años de denigrar su gestión. Y ahora resulta, precisamente, que me encuentro con la condena de la “universidad política”, hecha por un candidato-rector que pactó con los partidos políticos para ser elegido Rector de la Universidad Complutense de Madrid.

Cuando escribí mi primera entrada en este blog, traté de entenderle. Pensé que ese pacto le terminó por pasar factura, que le habían dado una puñalada trapera y que eso le había pasado por ser buena persona. Sigo pensando que D. Joaquín es una buena persona, de trato afable y seriamente comprometido con su universidad, con la mía, con la de todos los complutenses. Pero ha tomado una opción política y con ella ha politizado la campaña y puede (dicho sea, con todos los respetos, dañar a la UCM que tanto quiere, que tanto queremos.)

No es de extrañar, por todo lo precedente que la cuenta de Twitter, “El Confidencial Rectoral”, haya publicado este banner, en el que coloca políticamente a los candidatos y apunta a nuevos pactos políticos postelectorales. Una pena.

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